Poco premio ante tanto infortunio (3-3)

EL PROTAGONISTA DEL PARTIDO.

El Valencia CF – Mestalla sumó su primer punto en el reingreso a la segunda división ‘B’ con sabor absolutamente agridulce. Con letras mayúsculas merece la actuación de Paco Alcácer; el valenciano no se quiso quedar atrás de su amigo ‘Rober’ y completó un ‘hat trick’, otro más de su carrera, en un partidazo soberbio. El equipo no le fue a la zaga y mereció la victoria, fue superior al Lleida y se sobrepuso a todas las trabas sufridas en los 90 minutos, hasta que no fue posible por la doble expulsión de Marc Castells y Salva Ruiz. Por si fuera poco, dos futbolistas de la importancia de Montoro y Pol cayeron lesionados, especialmente grave la del primero que sufre una fractura de peroné. Pese a todos los hándicaps, los de Mir, con un comportamiento admirable, aguantaron con el resultado a favor a falta de cinco minutos para los 90 reglamentarios. No obstante eran tantos factores en contra que el punto, pese a ser injusto, se debe dar por bueno.

El encuentro, pues, dio para mucho, con el Mestalla muy metido y el rival presionando muy arriba en sus líneas. Los catalanes dispusieron de la primera oportunidad clara en el minuto cuatro, en un uno contra uno de Jesús Ímaz ante Saúl, abortada por el guardameta blanquinegro, y el posterior remate de Ballesteros, tapado bajo la línea por Montoro. El lance se jugaba en treinta metros, con la defensa del filial marcando la raya lejos de su meta, por lo que cualquier despiste en un balón dividido suponía una acción peligrosa en las áreas. Con el choque de ida y vuelta, a los 10 minutos, Eldín y Paco Alcácer disfrutaron de una doble opción de batir a Víctor Ibañez, salvada también ‘in extremis’ por la zaga catalana.

No había tregua en el Mini Estadi, con buena presencia de público en sus gradas en un mediodía caluroso, típico del mes de agosto. Ambos equipos plantearon una dura batalla en la zona ancha, y procuraban guardar bien las espaldas para no sufrir huecos en defensa. La intención del Mestalla y Lleida, si por un lado deslucía el fútbol trenzado, dejaba entrever dos estilos de juego similares con una clara vocación de dominar el choque. Cualquier detalle que rompiera la cadencia del mismo era signo de peligro, cualquier aparición diferente de en el círculo central eran sinónimos de acción de peligro. Fue Cristian quien, a la media hora, interpretó bien la jugada, superó la doble barrera defensiva del Lleida con un gran pase interior hacia Paco Alcácer, que encaró con tranquilidad en el uno para uno a Ibáñez y le batió cruzándole el cuero a palo largo.

El Mestalla entró en su fase más fluida y tocaba con inteligencia para burlar la presión del Lleida. Tras el 1-0, el colegiado invalidó varias jugadas por fuera de juego, al menos dudosos, con buenos pases para romper la línea de los centrales. Los catalanes cada vez se acercaban menos, pero tuvieron el empate con un chut dentro del área pequeña de Ballesteros, que despejó como pudo Saúl, y el cuero sin dueño lo sacó la zaga con la celeridad precisa. También hubo opción de ampliar el marcador a favor, tras otro gran cuero en largo de Miñano a Cristian que le dejó todo el carril derecho para incurrir en el área, no obstante su centro fue demasiado impreciso. Y, en el descuento, una mala salida del portero rival propició el remate a puerta vacía del mismo Cristián, tras otra internada de Alcácer, pero con todo a favor envió la pelota arriba del larguero.

Tras el descanso, los catalanes subieron aún más las líneas hasta el centro del campo pero el filial no quiso ser menos y continuó siendo valiente reduciendo espacios para impedir que el Lleida maniobrase con comodidad. Y no lo hizo, habida cuenta de sus dificultades para mover con comodidad el cuero ante la concentración de los blanquinegros, y las continuas ayudas que propiciaban el uno para dos. El equipo de Mir, si fue capaz de doblegar la presión con oficio, también hizo lo propio con espacios por delante, donde estuvo muy cómodo.

El primer hándicap serio de la segunda mitad apareció con la lesión de Montoro, que ya venía de recuperarse de una anterior de la pasada temporada, y cuya actuación era vital en la labor del balance ofensivo-defensivo de nuestro equipo. Pero el mecanismo global estaba tan bien engrasado que, aunque el teórico dominio fuera visitante, el Mestalla era el que dominaba la situación y se acercaba con más peligro a la meta contraria. En el ecuador, una nueva acción brillante de Cristian, siempre atento al espacio, habilitó en un buen cambio de juego a Alcácer, cuyo latigazo en el área lo despejó con los pies el portero catalán. Merecía ser el 2-0, pero en la siguiente acción sin aparente peligro llegó la decisión, cuanto menos polémica, del colegiado pitando penalti de Salva Ruiz sobre Jorge Giménez, que transformó Ramón Verdú. El Mestalla además se quedaba con uno menos, pero la justicia no tardaría en aparecer y por partida doble, con el ‘hat trick’ de Paco Alcácer. Así, y a renglón seguido, tras transformar otro claro penalti, sufrido por el propio jugador, también un minuto después, Robert ponía un centro precioso para que el ‘killer’ blanquinegro alojara la pelota en la escuadra.

El encuentro, desatado por la inferioridad numérica del Mestalla y la consiguiente ventaja visitante, no estaba ni mucho menos sentenciado, y el árbitro, José Joaquín Gallego Gambín, lo acercaba más a la igualdad con otro penalti que marcaría Verdú. Pero los problemas no paraban de crecer. Desde luego que estaba escrito que este domingo, 28 tocaba sufrir, y a falta de 11 minutos el Mestalla se quedó con nueve futbolistas con la expulsión de Marc Castells, por doble amarilla. El rival, con dos jugadores más, dio el todo por el todo y encontró recompensa en el 3-3 con un centro de Jorge Giménez, rematado a la escuadra por Ballesteros.

Hasta el final, el valencianismo no paró de padecer. Había demasiada distancia entre ambos equipos, y el punto, habida cuenta de lo sucedido, era un premio fruto de las circunstancias, no por los méritos exhibidos por el filial y el Lleida. El punto que sabe a mucho pero que, por las decisiones arbitrales y las lesiones de Montoro, costó demasiado caro.

Ficha técnica

Valencia CF – Mestalla 3: Saúl, Carles Salvador, Tano (Robert, min. 54), Pol, Salva Ruiz, Eldin (Marc Castells, min. 52), Portu, Montoro (Carles Gil, min. 59), Miñano, Cristian, Paco Alcácer.

U.D. Lleida 3: Víctor Ibáñez, Pau Bosch, Jerson Bosch, Miguel Massana (Pere Milla, min. 80), Jaume Delgado, José Méndez (Jorge Giménez, min. 54), Jesús Ímaz, Asier Izaguirre, Javi Ballesteros, Mikel (Dani Pujol., min. 71), Ramón Verdú.

Goles: 1-0, Paco Alcácer, min. 30. 1-1, Jorge Giménez, min. 70. 2-1, Paco Alcácer, min. 71. 3-1, Paco Alcácer, min. 72. Verdú, min. 76, 3-2. 3-3, min. 85, Ballesteros.

Colegiado: José Joaquín Gallego Gambín. Mostró amarilla a los valencianistas Carles Salvador, Alcácer, doble amarilla a Marc Castells, y Salva Ruiz la roja directa, y la amarilla a Pau Bosch, Asier Eizaguirre, Pere Milla, Mikel Azdarren y José Méndez de la UE Lleida.

Incidencias: Segunda jornada del grupo III de la Segunda División ‘B’ en partido disputado en el Mini Estadi de la Ciudad Deportiva con buena entrada. El Club estuvo representado por el presidente, Manuel Llorente, el director de la Escuela, José Luis Martín Vila, el consejero Fernando Giner y el delegado social del filial, Salvador Gomar.