DIVISIÓN DE HONOR JUVENIL GRUPO VII.
Jornada nº 28.
VALENCIA 0 – VILLARREAL 0
ALINEACIONES.
VALENCIA: Héctor Pizana; Nacho Vidal, Tendillo, Fran López, Fran Martínez; Tropi, Fernando Cano (Rulo, 88’), David Martínez (Sito, 56’), Nacho Gil; Vicent Albert (Maiki, 70’) y Borja Domingo (Peralta, 83’).
VILLARREAL: Borja; Miguel, Charlie, Juan, Javi; Víctor (Aleix, 65’), Cassano, Manu (Nacho Lorenzo, 78’), Pedro (Madger, 65’); Miguel Parrales y Mario.
Árbitro:
García Gallegos. Amonestó a los locales Borja Domingo, Fran López, Rulo y Héctor y al visitante Víctor. Expulsó con roja directa al valencianista Peralta en el minuto 95’.
Incidencias:
Partido disputado en el Antonio Puchades ante unos 800 espectadores.
Crónica.
El Juvenil “A” del Valencia CF volvió a proclamarse matemáticamente Campeón de Liga del grupo VII de División de Honor Juvenil precisamente ante el equipo que consiguió el título la temporada pasada, el Villarreal, que llegó a Paterna con la idea de amargarle la celebración a los valencianistas y a punto estuvo de conseguirlo.
El conjunto de Rubén Baraja, que se aseguró el primer puesto a falta de dos jornadas para la conclusión de la liga, había realizado una temporada inmaculada en Paterna, donde no había cedido ni un solo punto a lo largo de los trece encuentros anteriores, si bien para la ocasión, el rival también llegaba necesitado de puntos para intentar meterse en la próxima edición de la Copa del Rey. Y con estos alicientes los aficionados pudieron disfrutar de un encuentro de máxima rivalidad, con tensión, emoción y todos los alicientes necesarios para que hasta el silbido final nadie se levantara de sus asientos. El valencia tomó la iniciativa en los primeros cuarenta y cinco minutos y gozó de buenas oportunidades sobre todo en un disparo de Nacho Gil a pase de Vicent Albert que se marchó ligeramente alto y en una falta con los cromos cambiados con Gil como ejecutor y Albert que no llegaba al remate. La oportunidad más clara del primer tiempo sería para el submarino amarillo en un envío de Pedro para Mario que ante la media salida de Pizana, el héroe valencianista, evitó el gol con la punta de los dedos enviando a córner ante el disparo potente y envenenado del delantero castellonense. Los locales tuvieron la suya a cuatro minutos del descanso en un centro de David Martínez que remató viniendo desde atrás Borja Domingo fuera por muy poco. Con el tiempo reglamentario cumplido, el árbitro García Gallegos sacó fuera del área una falta que se cometió dentro sobre el propio ariete valencianista que acabaría lanzando Fernando Cano buscando la escuadra y que salvó Borja el portero del Villarreal antes de que el primer tiempo tocara a su fin.
En la segunda mitad el dominio pasó a manos del Villarreal que buscaba un gol que aguara la fiesta a los locales. Pero de nuevo Héctor Pizana evitó la derrota de los valencianistas con afortunadas intervenciones a remates de Pedro, Miguel Parrales y Víctor. A falta de veinte minutos para la conclusión un envío en profundidad de Tropi para Borja Domingo no lo aprovechaba el delantero valencianista solo ante el otro Borja, el portero castellonense, cruzando en exceso. Poco después el “nueve” blanquinegro volvía a perdonar tras una magnífica asistencia de Sito por la izquierda. Los minutos finales fueron de angustia para el Valencia que vio como el Villarreal gozaba de tres claras oportunidades para llevarse los tres puntos en un saque de esquina de Aleix por la derecha que sacó Pizana en primera instancia y no pudo rematar Miguel Parrales; a renglón seguido en un libre indirecto botado por el propio Aleix que cabeceó Mario al lateral de la red. Y la más clara a falta de cuatro minutos para la conclusión en un balón de Madger para Mario que remató con potencia ante la salida del portero local para que el balón acabara estrellándose en la parte alta del larguero para marcharse finalmente fuera. El partido llegó al tiempo de prolongación y el Valencia trató de alejar el balón lejos de su portería, viviendo momentos de mucha tensión que acabaron con la expulsión de Peralta por agredir a un jugador del Villarreal, y con la tangana que se montó en el centro del campo cuando el conjunto de Baraja celebraba el título. La cosa no pasó a mayores y la felicidad estalló en el Antonio Puchades mientras el técnico era lanzado al aire por los jugadores valencianistas que han realizado una gran temporada y son campeones con todo merecimiento.
José Sanchis.
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