El técnico del filial sigue. A Llorente no le ha gustado nada la planificación. Se espera un plus de los jugadores.
«La situación es preocupante pero la responsabilidad no es solo del entrenador. Al equipo lo ves entrenar durante la semana y la verdad es que entrena muy bien... pero luego llega el fin de semana y compite muy mal. Esta semana te vuelves a poner por delante en el marcador y vuelves a perder... pero lo que queremos ver es cómo reacciona el equipo después de enganchar un resultado positivo». Son palabras de Javi Cabello, director de fútbol base, en alusión a la delicadísima situación deportiva que atraviesa el filial.
El equipo que dirige Óscar Fernández cayó el domingo en Terrassa (2-1) y es colista en solitario con cinco puntos pero pese a ello, el técnico sigue en su cargo. ¿Se debe la continuidad de Óscar Fernández a la falta de liquidez? En principio no, según afirman fuentes de la propia entidad. El propio Cabello, de hecho, indica que el equipo trabaja bien y, además, todo apunta a que en el caso de una posible destitución de Óscar sería el técnico del juvenil Vicente Mir quien se haría con las riendas del equipo (tiene título nacional aunque hasta diciembre, legalmente, no podría coger al equipo), lo que significa que no habría ningún dispendio especial.
Así las cosas, las miras se giran ahora hacia una plantilla que este verano fue profundamente remozada pero en la que hay jugadores muy bien pagados, así como hacia el propio Javi Cabello (máximo responsable de la planificación) puesto que a Llorente no le ha gustado nada cómo se ha panificado el equipo ya que no se han sabido cubrir las vacantes que quedaron tras las salidas de futbolistas como Guaita, Jaume, Ximo Navarro, Lombán, Carlos David, Toledo, Iago, Pita etc...
El presidente exige pese a que él fue el primero en verano, en su afán de reducir gastos, que cerró el grifo para fichar futbolistas de nivel en una temporada en la que la hornada subida del juvenil A tampoco ofrecía demasiado entre lo que escoger. Así las cosas el resultante parece poco menos que blanco y en botella: La cúpula no culpa sólo al entrenador sino también a los jugadores y a quien se encargó de configurar el equipo.
Ayer se vieron caras largas en Paterna en la vuelta al trabajo y, tras la sesión, Óscar y Javi Cabello mantuvieron una nueva conversación. El próximo fin de semana el equipo visita al líder, el Mallorca B.
«La situación es preocupante pero la responsabilidad no es solo del entrenador. Al equipo lo ves entrenar durante la semana y la verdad es que entrena muy bien... pero luego llega el fin de semana y compite muy mal. Esta semana te vuelves a poner por delante en el marcador y vuelves a perder... pero lo que queremos ver es cómo reacciona el equipo después de enganchar un resultado positivo». Son palabras de Javi Cabello, director de fútbol base, en alusión a la delicadísima situación deportiva que atraviesa el filial.
El equipo que dirige Óscar Fernández cayó el domingo en Terrassa (2-1) y es colista en solitario con cinco puntos pero pese a ello, el técnico sigue en su cargo. ¿Se debe la continuidad de Óscar Fernández a la falta de liquidez? En principio no, según afirman fuentes de la propia entidad. El propio Cabello, de hecho, indica que el equipo trabaja bien y, además, todo apunta a que en el caso de una posible destitución de Óscar sería el técnico del juvenil Vicente Mir quien se haría con las riendas del equipo (tiene título nacional aunque hasta diciembre, legalmente, no podría coger al equipo), lo que significa que no habría ningún dispendio especial.
Así las cosas, las miras se giran ahora hacia una plantilla que este verano fue profundamente remozada pero en la que hay jugadores muy bien pagados, así como hacia el propio Javi Cabello (máximo responsable de la planificación) puesto que a Llorente no le ha gustado nada cómo se ha panificado el equipo ya que no se han sabido cubrir las vacantes que quedaron tras las salidas de futbolistas como Guaita, Jaume, Ximo Navarro, Lombán, Carlos David, Toledo, Iago, Pita etc...
El presidente exige pese a que él fue el primero en verano, en su afán de reducir gastos, que cerró el grifo para fichar futbolistas de nivel en una temporada en la que la hornada subida del juvenil A tampoco ofrecía demasiado entre lo que escoger. Así las cosas el resultante parece poco menos que blanco y en botella: La cúpula no culpa sólo al entrenador sino también a los jugadores y a quien se encargó de configurar el equipo.
Ayer se vieron caras largas en Paterna en la vuelta al trabajo y, tras la sesión, Óscar y Javi Cabello mantuvieron una nueva conversación. El próximo fin de semana el equipo visita al líder, el Mallorca B.
Noticia de Superdeporte.
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